La llegada de Lionel Messi al París Saint-Germain revolucionó el planeta deportivo, tras una emotiva despedida del astro del conjunto que construyó toda su trayectoria, el Barcelona.
Al-Khelaifi poco poseía que ver con el fútbol hasta el año 2005. Antes de esto dedicó parte de su historia a ser jugador profesional de tenis, una especialidad donde sumó más derrotas que triunfos, más allá de representar por numerosos años a su país, Catar, en la Copa Davis.
Sus ganancias como profesional en la ATP fueron escasas, pero le bastaron para entablar a lo largo de todos esos años un vínculo personal y entrañable con Tamim bin Hamad al Thani, con quien jugó numerosos tornes de la Davis y quien era en ese entonces el príncipe heredero de Catar. Hoy en dia ya es el emir de este Estado.
Fue la familia al Thani la que le dio ingreso al jeque a Qatar Investment Authority (QIA), una compañía que gestiona las ganancias petroleras del Estado. Y fue con esta compañía que Al-Khelaifi fundó Qatar Sports Investments en 2005, que poseía como finalidad invertir en proyectos de deportes cerca del mundo.
Desde ese momento este grupo empresarial se ha solicitado de inyectar enormes proporciones de capital al grupo parisino, que con el trabajo deportivo y al ocupar las primordiales plazas de la liga francesa, de esta forma como disputar los primordiales torneos de Europa, logró llevar a cabo desfilar a enormes personalidades del fútbol como Zlatan Ibrahimović, Edinson Cavani, David Beckham, Neymar, David Luiz, Kylian Mbappé, Ángel Di María, Gianluigi Buffon, Keylor Navas, Dani Alves y Lucas Moura, por ejemplo figuras del deporte.
Sin lugar a dudas, una de las primordiales transferencias en las que se encaminó Al-Khelaifi fue la estipulación laboral de Neymar, por quien abonó 222 millones de euros en 2017.
Desde su llegada a la presidencia del club y con las figuras que pudo contar a lo largo de diez años, el jeque catarí logró siete Ligue 1, seis Copas de Francia, seis Copas de La Liga y ocho Supercopas de Francia.
El PSG puso sobre la mesa un número de 40 millones de euros cada un año para llegar a un convenio con el 10 argentino. Además, se conoció que el contrato va a ser por tres temporadas y, una vez termine, cuando Messi tenga 37 años, va a poder prolongar el contrato por una temporada más.
Además, se llegó a un feliz término sobre los temas de derechos de imagen, bonificaciones y prima de fichaje. Este último punto, significaría otros 30 millones de euros para Lionel Messi, quien se ve estar muy contento con su elección tras su arribo a París.
